El 26 de enero, un accidente de helicóptero se llevaba por delante la vida de uno de los mayores astros del baloncesto y el deporte que ha conocido el mundo en las últimas décadas. Kobe Bryant, de 41 años, fallecía en un corto trayecto en Los Ángeles, California, en un choque del aparato contra una colina en la zona de Calabasas. En ese helicóptero también viajaba una de sus cuatro hijas, Gianna, de 13 años, jugadora de baloncesto y que también perdió la vida en el siniestro. Junto a ellos iban también dos amigas de la pequeña, sus padres y una entrenadora. Todos ellos fallecieron.
Tras el terrible golpe inicial por la pérdida de parte de su familia, la viuda del deportista, Vanessa Bryant, prepara ahora sus armas para una demanda millonaria. Al parecer, Bryant va a exigir “millones de dólares” por las ganancias que su familia ha perdido a causa de la prematura muerte de su esposo.
“Como resultado de los fallecimientos de Kobe y Gianna, Vanessa Bryant busca daños económicos, daños no económicos, daños punitivos, intereses de prejuicio y otras medidas de alivio que la Corte considere justas y apropiadas”, se puede leer en la demanda interpuesta por los abogados familiares y a la que ha tenido acceso el medio estadounidense The Blast.
Vanessa Bryant ya había iniciado un procedimiento judicial unos meses atrás en el que busca esclarecer quiénes fueron los culpables y cuáles las causas de la muerte de su marido y de su hija. Ahora, sin embargo, va un paso más allá, haciendo una apuesta a futuros. “Aunque el cálculo total de los daños personales está por determinar, las perdidas futuras de Kobe Bryant equivaldrían a cientos de millones de dólares”, se puede leer en el documento.
En febrero, la viuda y los familiares de los demás fallecidos interpusieron una demanda —cuya cuantía se desconoce— en la que acusaban de homicidio imprudente a la compañia del helicóptero, Island Express. Aseguraban que el piloto no “puso el cuidado requerido para pilotar la aeronave” y que fue negligente por volar en condiciones atmosféricas tan adversas como las de ese día, y la compañía por permitirlo. Por su parte, la empresa ha tratado de evitar la culpa e insiste en que volar en helicóptero es “inherentemente peligroso” y alguien como el piloto debería haberlo dicho, pero no es responsabilidad de la compañía.
Según la revista económica Forbes, el patrimonio de Kobe Bryant ascendía a 600 millones de dólares, unos 550 millones de euros. Su sueldo con los Angeles LAkers se unían a sus acuerdos de patrocinio, y gracias a ello obtuvo unos 62 millones de dólares, especialmente gracias a su colaboración con la marca deportiva Nike, su socio más importante y lucrativo con el que llevaba trabajando desde 2003. Según Forbes, colaboró con más de 20 marcas, como McDonals, Coca-Cola, Mercedes-Benz y Hublot. Más allá de esas ganancias, Bryant supo invertir en empresas comerciales y emergentes, como la bebida deportiva BodyArmor (y una parte pertenecía a Coca-Cola) y las empresas Art of Sport y HouseCanary. También tenía sociedades de inversión, e impulsó una empresa de videojuegos llamada Epic Games, creadora a su vez del popular juego Fornite. Se calcula que su viuda recibirá una herencia de unos 200 millones de dolares (180 millones de euros).
