• diciembre 29, 2020
  • Raúl Vega
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De visita en el Gillette Stadium de Foxborough y en su quinta victoria consecutiva,  Buffalo hizo pedazos a Nueva Inglaterra en el cierre de la semana 16 de la NFL al derrotarlos por 38-9.
Con cuatro anotaciones por la vía aérea, Josh Allen llegó a 34 en la temporada y además acumuló 320 yardas totales para llegar a 4,320 en una gran campaña de 12-3 en la que los Bills acabaron con 25 años sin ganar el título de su división, la del Este de la Conferencia Americana.
El mariscal de campo de los Bills, que antes de recibir descanso  también aportó 35 yardas en 4 acarreos, sigue en plan grande y como el tercero en discordia, además de Aaron Rodgers y Patrick Mahomes, en la lucha por ser designado como el Jugador Más Valioso de la temporada regular del 2020.
Josh Allen ya superó el récord de la franquicia de 33 pases para touchdown que logró Jim Kelly en 1999 y además igualó a Steve Young como los únicos en superar las 4 mil yardas, los 30 pases de anotación aéreos y los 5 touchdowns por tierra en una misma campaña.
Otra figura de la noche para Buffalo fue Stefon Diggs, llegando con las 9 de hoy a 120 recepciones totales como líder de la NFL en dicha categoría y a 1,459 yardas por aire,  también ya como el mejor de la Liga, además de entrar 3 veces a las diagonales con el ovoide en las manos. 
En contraste, todo le salió mal a Bill Belichick y a sus Patriotas que humillados ahora por Buffalo tendrán su primera temporada perdedora en los últimos 20 años, desde el año 2000, ahora con marca de 6-9 y con otra mediocre actuación de Cam Newton que antes de ser relevado por tercera vez en el año dejó cifras de sólo 34 yardas aéreas sin poder anotar y con otras 24 yardas por tierra y muy a pesar de que logró un touchdown acarreando el balón. 
Jarred Stidham, segundo QB de Nueva Inglaterra sumó 44 yardas en 4 de 11 envíos, nada tampoco para presumir.

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