Tan importantes como los equipos, como los jugadores y todo lo que rodea al Super Bowl, son los balones con los que se jugará el duelo por el título de la NFL entre Kansas City y Tampa Bay. 
Actualmente y por reglamento se debe contar con 54 balones para un partido oficial de la NFL y para el Super Tazón, 24 los tendrá el equipo considerado local y 24 el equipo visitante y otros 6 que tendrán los árbitros para las patadas de kick-off, de despeje, de punto extra y/o gol de campo. Todos tienen que ser revisados antes del juego para que estén inflados bajo los parámetros y las medidas adecuadas, sin defectos o imperfecciones que puedan perjudicar o beneficiar el desempeño de alguno de los dos equipos. 
El ovoide que se utilizará este año en el Super Tazón LV tiene nombre, se llama “The Duke” y es fabricado por la empresa Wilson, la misma que se encarga de surtir de balones a la NFL desde 1941.
El nombre surgió en honor a Wellington Mara, hijo del entonces propietario y fundador de la franquicia de los Gigantes de Nueva York, Tim Mara, quien junto a George Halas, dueño y headcoach de los Osos de Chicago, logró el histórico acuerdo con el fabricante de balones con sede en Aida, en Ohio.
A Wellington los jugadores le decían “El Duque” y se mantuvo esa costumbre hasta 1970 cuando tras la fusión de las ligas el balón dejó de tener un nombre propio. Sin embargo en el 2006 tras la muerte de Wellington, la NFL y la marca Wilson readoptaron el nombre para la herramienta principal del juego de futbol americano en los Estados Unidos. 
De cuero y cosido a mano, el diseño actual en tono bermellón lleva una vez más “tatuado” del lado izquierdo el nombre “The Duke”, por encima del logotipo de la marca deportiva. En medio, en la parte central la pelota trae el logo del Super Bowl LV y del lado derecho la firma del actual Comisionado de la Liga Roger Goodell, misma que da fé de que la autenticidad de todos y cada uno de los balones oficiales con los que se jugará el Super Tazón y también para los miles que serán solamente utilizados para su venta como souvenirs del gran evento.
En la otra cara el ovoide lleva también grabados los nombres de los equipos contendientes, Jefes y Bucaneros, el nombre completo de lo que significan las siglas de la NFL y nuevamente el logo de Wilson, el fabricante.