En su presentación oficial, vía telefónica por la crisis sanitaria, como nuevo mariscal de campo de los Bucaneros de Tampa Bay, Tom Brady aclaró muchos detalles de su salida de los Patriotas.
De entrada negó sentirse molesto, defraudado y mucho menos traicionado por no haber recibido alguna oferta por parte del propietario del equipo de Nueva Inglaterra, Robert Kraft, de quien se despidió el pasado 16 de marzo: “Tuvimos una gran conversación. Yo sólo quería expresar lo que significaba para mí en mi vida y hablamos con el entrenador Belichick al mismo tiempo. Estábamos en diferentes lugares, así que hablamos con él y tuvimos una gran conversación”.
Brady aseguró que nada le hará olvidar el gran cariño y agradecimiento que siente por la franquicia de Boston: “No quiero hablar sobre el pasado, porque eso no es relevante para lo que es importante en mi futuro y lo que está sucediendo en esta temporada baja para mi. No tengo (en mi mente y en mi corazón) mas que dos décadas de una experiencia increíble, y aprendí de algunos de los mejores jugadores y los mejores entrenadores y la propiedad del equipo. Creo que para todos nosotros, las cosas en la vida pueden cambiar y hay que poder adaptarse y evolucionar. Con cada uno de esos cambios se convierten en diferentes oportunidades para aprender y crecer. Ahí es donde estoy”.
Brady garantizó que aunque defienda otros colores nunca dejará de ser la misma persona de siempre para sus amigos y ahora ex-compañeros: “Han pasado muchos días respondiendo a muchos mensajes de texto increíbles de mis compañeros de equipo. Cada vez que te vas de alguna parte es muy emotivo. Seré amigo de mis antiguos compañeros de equipo y entrenadores por el resto de mi vida. Eso no va a cambiar solo porque estoy usando una camiseta diferente”.
Y aunque esos amigos ya serán sus rivales también les deseo mucha suerte: “Sé que los Patriots tendrán un gran equipo. Ellos siempre lo hacen. Tienen grandes jugadores. Gran liderazgo, grandes entrenadores. Ciertamente les deseo lo mejor”.