La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) congeló las cuentas personales de los directivos del Cruz Azul y además hermanos, Guillermo y Alfredo Alvarez Cuevas, y también las de Victor Garcés Rojo.
El motivo: la investigación que sobre todos ellos se realiza desde hace tiempo por los delitos de enriquecimiento ilícito, operaciones con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada.
La medida también incluyó las cuentas de la Cooperativa Cruz Azul, de lo que se dieron cuenta algunos socios y distribuidores, cuando intentaron, sin éxito, realizar algunos movimientos.
Se habla de que los tres personajes movieron cerca de 1,200 millones de pesos de la organización cementera en varios países y sin conocimiento del resto de los socios de la Cooperativa hidalguense.
Todo esto podría afectar también la operación diaria del Club de fútbol Cruz Azul, poniendo en peligro sueldos y presupuestos para la planeación del próximo torneo, el Apertura 2020, pues aunque “Billy” Alvarez estaba amparado, éste recurso solamente le protegía en caso de una probable orden de captura y aprehensión que fuera emitida por autoridades locales o federales, pero no por si la Comisión Nacional Bancaria y de Valores congelaba sus cuentas.
Por lo pronto habrá que esperar nuevos acontecimientos y consecuencias, pero es muy prematuro asegurar, como ya lo hicieron algunos medios, que la franquicia cementera será desafiliada de la Federación Mexicana de Fútbol, pues la responsabilidad o culpabilidad de los tres directivos no ha sido comprobada todavía por la ley, aunque es un hecho que reglamentariamente habría riesgos en un futuro.
