Derek Jeter ya es inmortal. El pelotero de los Yanquis de Nueva York ingresó este miércoles al Salón de la Fama del Beisbol de las Grandes Ligas junto con Larry Walker, Ted Simmons y otros dirigentes y periodistas como los nuevos integrantes de la Clase del 2020 que atrasó su inducción del año pasado por la pandemia. 
La ceremonia se llevó a cabo bajo un estricto protocolo sanitario pero eso no le quitó la magia a un momento tan especial y tan esperado por el que sueñan todos los peloteros al terminar sus trayectorias y aventuras en el diamante verde. Entre los testigos estuvo Michael Jordan, gran amigo de Jeter y como admiradores recíprocos.

Con todos los merecimientos para ser inmortalizado después de ganar cinco títulos de las Mayores con los “Mulos de Manhattan” en 1996, 1998, 1999, 2000 y 2009, el shortstop posee además impresionantes cifras individuales después de 19 años de una carrera que inició en 1995 y que terminó en el 2014.

Jeter pegó 3,465 imparables y 260 homeruns en 2,747 juegos siempre con la franela de los Yanquis. Además anotó 1,923 carreras e impulsó otras 1,311.  
El “Capitán América” fue Novato del Año en 1996 y fue nombrado 14 veces para el Juego de Estrellas. También fue  designado el Más Valioso de la Serie Mundial en el año 2000. Obtuvo 5 Guantes de Oro y 5 Bates de Plata. 
Los otros dos nuevos miembros entronizados hoy al recinto de Cooperstown en Nueva York fueron el jardinero canadiense Larry Walker que jugó 17 años en la MLB para los Expos de Montreal, los Rockies de Colorado y los Cardenales de San Luis, además del receptor Ted Simmons quien brillara en 13 de sus 21 temporadas con los Cardinals siendo también un tremendo toletero, solamente superado en su historia al bat en carreras impulsadas por el legendario Yogi Berra y en cantidad de hits por el poderoso Iván Rodríguez de Puerto Rico.
En cuanto a la Clase del 2021 no habrá ceremonia de exaltación porque no hubo nadie que fuera elegido conforme a los reglamentos para ser inducido al Salón de la Fama de las Grandes Ligas.