En la función UFC 256 celebrada en las Vegas, y en uno de los mejores combates del año, el tijuanense Brandon Moreno estuvo cerca de hacer historia y convertirse en el primer mexicano en ser campeón de la Ultimate Fighting Championship, pero los jueces decretaron como empate mayoritario su pelea con Deiveson Figuereido, que así retuvo el cetro de peso mosca.
Solamente uno de los tres jueces en el Complejo Apex de la ciudad del juego vió ganar al sudamericano, con 47-46, pero los otros dos calificaron la contienda de manera idéntica con 47-47 y 47-47.
El gladiador azteca, que cumplió 27 años hace unos días, dio una gran demostración de calidad, orgullo, espíritu y carácter, pero ni así le alcanzó para derrotar al monarca brasileño de 32 años cuya marca quedará en 20-1-1, mientras que el récord del “Assasin Baby” es ahora de 18-6-2, todavía como número uno del ranking de las 125 libras.
Una nueva cita entre ambos estará seguramente invadiendo la mente maestra de Dana White, el magnate de la UFC, quien casi de inmediato y en cuanto terminó la pelea, le susurró a sus más cercanos colaboradores que Brandon Moreno se había ganado una revancha muy pronto, antes de los primeros tres meses del próximo 2021.