Como en un juego de carambola en el que un golpe genera varios movimientos alternos y consecuentes, así se está moviendo la Fórnula Uno fuera de las pistas, ya que tras el anuncio de la salida de Sebastian Vettel de Ferrari y la llegada ya oficial de Carlos Sainz en su lugar, ahora es Daniel Ricciardo el que dió la noticia, pues el piloto australiano dejará la escudería Renault al final de la temporada 2020 y ocupará el asiento del joven español en McLaren a partir del 2021, tal y como lo dió a conocer este jueves a través de un comunicado el equipo de Woking.
Ya con 30 años de edad y mucha experiencia, Ricciardo firmará por 5 temporadas con McLaren como el piloto número uno del equipo, dejando a Lando Norris, su nuevo compañero, como el aprendiz. Ricciardo llegó a la F1 en 2011 con HRT y después estuvo en las filas “hermanas” de Toro Rosso y Red Bull, hasta que en 2019 emigró a Renault. Ha logrado 7 victorias en 172 grandes premios ocupando 29 veces el podio. Ha logrado 3 pole positions y en 13 ocasiones dió la vuelta más rápida en un circuito del “Gran Circo”.
Andreas Seidi, Director de McLaren, expreso así su satisfacción por este fichaje: “Daniel es un ganador de carreras probado y su experiencia, compromiso y energía serán una valiosa adición a McLaren y a nuestra misión de volver al frente del campo. Con Daniel y Lando como compañeros de equipo, creo que tenemos dos corredores que continuarán entusiasmando a nuestros fans y ayudando al equipo a crecer”.
El único descontento y muy molesto fue el Jefe del equipo Renault, Cyril Abiteboul, quien reclamó así la partida de Daniel Ricciardo: “En nuestro deporte y particularmente con la extraordinaria situación que vivimos, la confianza mutua, la unidad y el compromiso son, más que nunca, valores clave en un equipo de fábrica”.
Lo que resta ahora será saber quién tomará el lugar de Ricciardo en Renault para el 2021, ya que la escudería francesa acaba de renovar a Esteban Ocon por dos años, pero van a necesitar a un conductor de mayor categoría que lleve la batuta como lo hacía el australiano.
