El término surf que se traduce como oleaje, así se le denomina a aquella actividad deportiva en la que un individuo se deja llevar de pie encima de una tabla que es arrastrada a gran velocidad sobre una ola marina.

Su origen se sitúa en el islas del Pacífico Sur debido a la emigración de nativos polinesios pudo hacer llegar esta actividad a las islas de Hawái, donde la expedición del capitán británico James Cook pudo descubrirla para el mundo en el año de 1778.

El surf en Hawái estaba muy integrado dentro de la cultura y el estilo de vida nativo, y su práctica era casi obligada para la nobleza de la zona, que lo utilizaba para ganarse el respeto de la población surfeando de pie sobre tablas de gran tamaño. 

Fue así que con tiempo y con mucha práctica y destreza los hawaianos se convirtieron en asombrosos exploradores, navegantes y expertos en el arte de “correr olas”. Para el año 1900 el surf en Hawái desarrollándose cada vez más gracias al surfista hawaiano Duke Kahanamoku gana la medalla de oro en natación en los Juegos Olímpicos de Estocolmo en 1912.

Es hoy reconocido en el mundo entero como uno de los deportes extremos más apasionantes donde es el hombre quien tiene que dominar esas olas tan difíciles a veces por eso es que el surf es tan reconocido y amado por los deportistas extremos.