Por Karina Elián Salinas

Probablemente al pensar en la combinación del arte con el jazz, sólo recordemos los diseños de portadas en los discos que todos conocemos. Y aunque son dignos de admirarse estos trabajos, en realidad, existe mucho más tela de dónde cortar. 

En los últimos años han surgido exponentes que han apostado por utilizar diferentes propuestas artísticas que tienen como común denominador al jazz.

Uno de ellos, es el dibujante chileno Alejandro Kurt, mejor conocido como “Kuto”, quien basándose en 54 leyendas jazzísticas, creo una baraja de naipes.

La idea vino a su mente, cuando recibió un regalo, el cual era un calendario de sobremesa con imágenes en blanco y negro de diversos jazzistas. Este obsequio lo acompañó durante un año, convirtiéndose en su cómplice al momento de dibujar en su área de trabajo.

La misma persona que le obsequió el calendario, le manifestó que resultaba muy difícil encontrar algo para regalar a un adicto al jazz.

Por ello, pensando en ese detalle, un día después de observar las fotografías, el artista se preguntó: ¿Qué cosa que tenga que ver con el jazz me gustaría tener?

Como resultado surgió la idea de las barajas, pues era algo con lo cual podría plasmar su devoción a estos grandes de la sincopa y pasar un rato agradable con dichos naipes.  Así que el chileno, se dedicó a diseñarlas decidiendo que su baraja debía ser sofisticada, pero a la vez sencilla. 

Como herramienta utilizó sólo un lápiz de grafito, plasmándolos en blanco y negro, pues como él mismo dice: “Los dibujos debían ser del color del jazz”.

Lo sencillo fue decidirse por realizar un diseño original que expresara su amor hacia la música, lo difícil surgió en el proceso de elaboración tanto de imprenta como de edición final. 

Pero en definitiva, el proceso de selección de los músicos para integrar la baraja, fue el punto más complejo para Kuto. Sólo 54 de ese océano extenso que es el jazz. 

El artista se lo cuestionó una y otra vez, pero finalmente logró escoger a quienes integrarían la baraja denominada “LOS GRANDES DEL JAZZ”, entre ellos Miles Davis, Charlie Parker, Billie Holiday, y todas esas voces que seguramente están en nuestra mente.

Cómo vemos para el jazz no existen límites, pues no sólo podemos disfrutar  de sus piezas y ejecuciones, sino que también una partida de póker será testigo de esa grandeza que caracteriza a la sincopa.