Por Alex Rodríguez
Joe Strummer es una figura única, rebelde, inconformista e innovador que estaba dispuesto a cambiar el mundo.
El 13 de mayo, The Clash comenzó su gira en Alemania, Berlin. Joe sentía que Alemania ya estaba en una época de resurgimiento punk. Cuando llegaron a Hamburgo, siete días después, el grupo se vio enfrentado por la violencia anarco-punk.
Una facción anarco-punk del publico de Hamburgo, sentía que con salida de London Calling, The Clash habían sucumbido las fuerzas del mercado. En los conciertos tomaban muy seguido el micrófono a Joe, para lanzar las protestas políticas.
Joe Strummer molesto bajo del escenario hacia el público y le reestrego la guitarra, una Fender Telecaster al atacante principal, iniciando un disturbio. Fue detenido y el concierto concluyó antes de tiempo. Lo llevaron a la comisaría local. Al siguiente día, la edición del periódico local, contenía una fotografía de un hombre manchado con sangre y vendado, siendo sacado del recinto en camilla.
“Estuve cerca de matar a alguien y este hecho me hizo ver que no puedes encarar la violencia con más violencia. La violencia me había controlado por primera vez. Desde ahí, decidí que la única manera de combatir la agresión del público, es tocar una canción aburrida”.
Joe Strummer.