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En el Estadio de La Luz de Lisboa en Portugal, la casa del Benfica, arrancaron los cuartos de final de la Champions League y en juego único y con cierre verdaderamente dramático el Paris Saint Germain derrotó al Atalanta de la Serie A de Italia 2-1 y rompió su mala racha de cuatro ediciones seguidas sin pasar a semifinales.
El actual campeón de Francia no contó con Angel Di María, Marco Verratti ni Mauro Icardi y dejó en la banca de inicio a Kylian Mbappé por cualquier emergencia, pero aún así Neymar pudo abrir el marcador en los primeros minutos del juego, sólo que golpeó mal y falló increíblemente tras enfrentar mano a mano al arquero del club de Bérgamo, que por el contrario y tras dos grandes intervenciones de Keylor Navas, a la tercera finalmente pudo vencerlo para irse al frente con zurdazo del croata Mario Pasalic a los 26 minutos.
Las cosas no le salían al PSG y Atalanta cerraba todos los caminos por lo que Thomas Tuchel tuvo que meter a Mbappé (Min.60) con todo y su lesión, arriesgándolo todo y le resultó, pues Marquinhos igualó a los 90, cuando todo parecía perdido y porque otro relevo, Eric Maxim Choupo Moting, le dio la vuelta al score a los 93 haciendo estallar de alegría a los parisinos con su justa pero muy sufrida calificación.
La última vez que el PSG llegó a una ronda semifinal de un campeonato europeo de clubes fue en 1995, hace 25 años y su próximo rival será el ganador del duelo entre el Atlético de Madrid de España y el sorpresivo Leipzig de Alemania.
Por su parte el heroico Atalanta estuvo muy cerca de ser el séptimo equipo debutante en Champions en llegar hasta semifinales. El último en hacerlo fue el Villarreal hace 14 años.