Lo que antes era el regalo temido de la abuela, hoy es el uniforme oficial de las fiestas. En 2025, el Ugly Christmas Sweater ha dejado de ser una simple broma para convertirse en una pieza de colección que mezcla nostalgia, tecnología y mucho sentido del humor.

Aunque parece una moda reciente, el origen de esta prenda se remonta a los años 50, bajo el nombre de “Jingle Bell Sweaters”. En aquel entonces, eran diseños modestos y hechos a mano que buscaban celebrar el espíritu festivo con sobriedad.
Al correr del tiempo en los años 80s, gracias a personajes de la televisión y el cine (como Clark Griswold en National Lampoon’s Christmas Vacation), los suéteres se volvieron más ruidosos, coloridos y “más feos”.
En los 90 perdieron su encanto, pero el estreno de “El diario de Bridget Jones” (2001) lo cambió todo, pues ver a Mark Darcy con un suéter de reno gigante despertó un sentimiento de “ironía colectiva”.
Para 2002, en Vancouver, Canadá, se celebró la primera fiesta oficial de Ugly Sweaters. Desde entonces, el tercer viernes de diciembre se celebra el National Ugly Christmas Sweater Day (que en este 2025 cayó el 19 de diciembre).
¿QUÉ ES TENDENCIA EN LA NAVIDAD 2025?
Este año, el maximalismo ha llegado a su punto más alto. Ya no basta con un reno de lana; la moda de 2025 apuesta por la interactividad:
-Tech-Sweaters: Suéteres con luces LED programables desde el celular y altavoces integrados que reproducen villancicos en versión lo-fi o techno.
-Mashups de Cultura Pop: Diseños que mezclan la Navidad con franquicias de superhéroes, anime o memes virales del año.
-Sostenibilidad Vintage: Una de las tendencias más fuertes de 2025 es el DIY (hazlo tú mismo). Rescatar suéteres de tiendas de segunda mano y añadirles pompones, guirnaldas y cascabeles reciclados.
-Lujo “Kitsch”: Grandes firmas de moda han lanzado sus propias versiones en materiales como cachemira y mohair, elevando lo “feo” a la categoría de alta costura.
Se estima que en 2025, las búsquedas de “suéteres navideños con realidad aumentada” crecieron un 40%, permitiendo que, al ver el suéter a través de una pantalla, los personajes cobren vida.
Más allá de la estética, el ugly sweater triunfa porque es un ecualizador social. En una época de cenas de empresa y compromisos familiares, usar algo deliberadamente ridículo rompe el hielo, elimina la presión por lucir “perfecto” y nos permite, sencillamente, reírnos de nosotros mismos.
DEL “KITSCH” A LA PASARELA: EL UGLY SWEATER DE ALTA COSTURA
En 2025, marcas de renombre han decidido que si algo va a ser “feo”, al menos debe estar hecho con los materiales más exquisitos del mundo.
Casas de moda como Gucci, Stella McCartney, Givenchy y Dolce & Gabbana han integrado el concepto del suéter navideño en sus colecciones invernales. En lugar de fibras sintéticas, estas piezas se confeccionan en cachemira de Mongolia, mohair y lana merino virgen.
Este año, el sector premium ha definido tres corrientes principales:
*Logomanía Navideña: Marcas como Balenciaga o Prada han lanzado versiones donde sus logotipos se entrelazan con bastones de caramelo o copos de nieve en patrones Fair Isle (estilo tradicional escocés), pero con precios que oscilan entre los $800 y $2,500 USD.

*El Polo Bear de Ralph Lauren: Un clásico que en 2025 se ha vuelto objeto de culto. Las ediciones limitadas del oso vestido con su propio ugly sweater se consideran piezas de inversión que mantienen su valor en el mercado de reventa.
*Colaboraciones “High-Low”: Es común ver alianzas entre diseñadores de vanguardia y marcas de cultura pop (como una colaboración entre Loewe y algún estudio de animación) para crear piezas que mezclan el lujo con la nostalgia friki.
En la alta costura, el ugly sweater se mueve bajo el concepto de camp, es decir algo que es tan exagerado, artificial o de “mal gusto” que termina siendo una obra de arte.

