Cruz Azul hace historia… para el olvido: recibe 7 goles del Seattle Sounders en la Leagues Cup
Seattle, EUA. – El Cruz Azul vivió una noche negra en la Leagues Cup. En la primera fase del torneo, el club cementero fue humillado con un 7-0 ante el Seattle Sounders, en lo que ya es considerada la peor derrota de un equipo mexicano ante un club de la MLS.
El marcador no solo sacudió al futbol mexicano, sino que colocó a Cruz Azul en varios libros de récords… por las razones equivocadas:
- Es la peor goleada que ha recibido un equipo mexicano en torneos oficiales ante clubes de MLS.
- Iguala la peor derrota en la historia de Cruz Azul, compartida con el 7-0 sufrido ante América en 2022.
- Es la peor derrota internacional del club.
- La peor goleada de un club mexicano ante un equipo de CONCACAF.
- Y, junto con el 6-1 ante Fénix en la Libertadores 2003, consolida a Cruz Azul como el club mexicano con las dos mayores goleadas sufridas a nivel internacional.
¿Diferencia de presupuestos?
El resultado es más escandaloso al considerar que Seattle Sounders opera con un tope salarial menor a los $6 millones de dólares, mientras que Cruz Azul ha invertido más de $40 millones en fichajes durante el último año.
Una inversión que, al día de hoy, no muestra retorno alguno.
¿El problema es el DT?
Con Vicente Sánchez como técnico interino, Cruz Azul mostró orden y efectividad. Nunca recibió más de tres goles en un solo partido y sacó resultados a base de compromiso, incluso sin una plantilla estelar.
Hoy, bajo la dirección de Nicolás Larcamón —un entrenador con recorrido y prestigio en el fútbol mexicano—, el equipo no ha podido ganarle a Mazatlán ni a Atlas, y ahora ha sido arrasado en la Leagues Cup.
¿Y ahora qué?
La humillación reaviva las dudas sobre el proyecto deportivo de La Máquina, que ha entrado en otro bache profundo justo cuando parecía encontrar estabilidad. A pesar de los millones invertidos y una plantilla que, sobre el papel, es competitiva, los resultados no llegan y la paciencia se agota.
Los aficionados, otra vez, ven cómo se construye un equipo sin identidad, sin dirección… y sin alma.