La velocista estadounidense, Sha’Carri Richardson, considerada como la nueva mujer más velóz del mundo y candidata a ganar el oro olímpico, ha sido suspendida por un mes tras confirmarse que consumió marihuana y no podrá correr en Tokio.
La atleta norteamericana, la ganadora de la prueba y poseedora de la mejor marca en los 100 metros libres femeniles, dio positivo este viernes a dicha sustancia según lo anuncio la propia Agencia Mundial Antidopaje de los Estados Unidos, por lo que según el reglamento se debió haber borrado de manera automática su triunfo en los trials olímpicos del equipo de atletismo norteamericano celebrado en Oregon hace poco más de una semana. 
Aún así no esta descartada su  participación en los Juegos de Tokio ya que la sanción comenzó a correr el 28 de junio y cuando se cumplan los 30 días de sanción, Richardson todavía tendrá tiempo y oportunidad de competir al menos en el relevo de 4×100 femenino, pero todo esto depende de la postura y la decision tanto de la Federación de Atletismo a través de USA Track & Field como del Comité Olímpico de los Estados Unidos.
La corredora de 21 años explicó que los últimos días han sido de mucho estrés para ella por la muerte de su abuela durante el clasificatorio preolímpico y pidió disculpas a su familia, seguidores, compañeros y patrocinadores: “No supe controlar mis emociones en ese momento. Pido perdón enormemente si los he decepcionado, y lo hice”.
Jenna Prandini, que había sido cuarta en la clasificatoria de 100 metros femenil, fue informada que subió un puesto y que será parte ahora del equipo y la delegación estadounidense para ser una de las tres mujeres que correrán la prueba individual en Tokio, mientras que Gabby Thomas, que fue 5°, viajará ahora como la primera suplente.