En el deporte todos los días se escriben nuevas páginas de gloria y también de tristeza y en el tenis no es distinto. El contraste eterno entre la victoria y la derrota son emociones que no solamente viven los actores del juego sino también los testigos de las grandes hazañas y de los dolorosos descalabros.
Y así sucedió este martes en las canchas de Roland Garros donde Tamara Zidansek llegó por primera vez en su carrera a unas semifinales de un Grand Slam derrotando a la española Paula Badosa que por el contrario no pudo cumplir el mismo sueño que hoy disfruta la eslovena de 23 años y 85° del mundo.
Las cifras del juego, 7-5, 4-6, 8-6, son mera anécdota para Zidansek que todavía no sabe además lo que es ganar un título en el circuito profesional de la WTA.
Del otro lado y para Badosa tendrá que venir una pronta recuperación porque de todas formas lo que hizo llegando a los cuartos de final en Francia ya fue algo inédito y más que sobresaliente para ella, aunque no haya podido unirse a leyendas como Conchita Martínez o Arantxa Sánchez Vicario, Lilí Álvarez o Garbiñe Muguruza, como la quinta tenista española en acceder a unas semifinales de Roland Garros.
Badosa, también de 23 años, arrancó el torneo como la 35° del mundo y se irá ganando muchos puntos y trepando varios escalones en el ranking.
La otra semifinalista y rival de Zidansek en esta instancia será Anastasia Pavlyuchénkova de Rusia, quien venció este mismo día a la kazaja Yelena Ribákina en tres peleados sets por 6-7, 6-2 y 9-7, accediendo así a la ronda de las ocho mejores en París.
